“Mi Mamá me mima; Mi Mamá me ama; Yo amo a mamá”
“Ya Mamá no me mima; Ya Mamá no me ama;
...Yo aún amo a mamá”
...Yo aún amo a mamá”
A Luisa Rafaela, mi Mamá
No hay hecho que tenga por “más cierto”, que el de tu partida.
Contigo…y tras de ti, de súbito, se fue la magia que plenaba mis espacios.
¡Mamita mía, muy de tu hijo!
Cuando me concebiste; desde que me alumbraste; desde que mis encías, por mamar de tu savia, hicieron sangrar hasta llagar tus pezones, te hice mía, mamita mía.
Aquella guitarra amorosa que decías que rasgabas, intentando aprender, creo habértela oído desde mi “cuna vientre”.
¡Algo delante de mí que no podía agarrar!...era tu sombra junto a la mía, con la que jugué en mis primeros pasos.
Desde donde fui tuyo, venía haciéndote mía y en esa esclavitud de amores libremente nos amamos.
Hoy no estás sino en mí, que también me iré en el aroma de la existencia que se evapora.
Más nuestra ausencia, no logrará negar que estuvimos, aunque, si afirmará que hemos dejado de estar.
¡Mamita mía, muy de tu hijo!
Ya nunca me mimarás.
Ya nunca me amarás.
Más yo, te amaré siempre… en todo mi tiempo
No hay comentarios:
Publicar un comentario